BAÑO DE SOL
Si algún amigo me preguntara cómo orar, le contaría la historia de Bañodesol. - ¿Bañodesol? - ¡Claro!, Bañodesol. Quizás hasta usted lo haya visto. Ahí le va su retrato. Bañodesol está en el mar. Se preocupa muy poco de nadar. Sólo viene a tomar un baño de sol. Lo único que le importa es broncearse.