1903. Henri Caffarel nace el 30 de Julio, en Lyon – Francia. Sus padres fueron Ferdinand Caffarel y Elise Voisin. Tuvo un hermano menor, Georges. Su padre Ferdinand fue comerciante de fieltros y paños de lana. Fue bautizado el 2 de agosto por el Padre Louis Venard, que era su tío, en la Basílica de Saint-Martin d’ Ainay. Su familia tiene una fuerte tradición Católica, y ha dado catorce sacerdotes a la Iglesia, por lo que Henri Caffarel se desarrolló en un ambiente muy cristiano.

1911. El 22 de mayo hace su primera comunión en la Parroquia de San Francisco de Sales. Este acontecimiento fue muy importante para Henri Caffarel, que años más tarde dirá: “Fue una gracia para la Iglesia y también para mí. Si la Eucaristía hace a la Iglesia, también hace a Los Santos dentro de la Iglesia. Con el decreto de Pío X, la fuente eucarística se abrió ampliamente al pueblo cristiano hambriento.”

1921. Aprueba el bachillerato en la rama de Matemáticas. Durante este año hace un retiro con el Padre Plazenet, marista, y nace en él la primera idea de sacerdocio. Al creer que no tenía esa vocación, comenzó los estudios de Derecho. Ya en la Facultad de Derecho, sufre una especie de impotencia cerebral que lo obliga a dejar la Facultad para ir a trabajar con su padre. Los siguientes años va a la Universidad, de acuerdo a lo que le permitía su nivel de cansancio.

1923. En marzo tiene un “encuentro con Cristo”. Este año para Henri Caffarel es decisivo, porque se produjo el acontecimiento que logró orientar toda su vida: “A los veinte años, en un instante, Jesucristo se convirtió en Alguien para mí. ¡Oh! Nada espectacular. En ese lejano día de marzo, yo supe que era amado y que yo amaba, y que en adelante así sería entre él y yo por toda la vida. Entonces, ‘me jugué el todo por el todo’.”

1924. Cumple con el servicio militar en Autun, de mayo de 1924 a noviembre de 1925.

1926. Se marcha a la abadía de Auberive con el Padre Vladimir Ghinka, futuro Obispo. De acuerdo a la biografía de Monseñor Ghinka, fue él quien despertó en Henri Caffarel la idea de la riqueza del matrimonio cristiano. La abadía de Auberive debe cerrar sus puertas en 1928.

1928. Henri Caffarel está en París luego del cierre de la abadía de Auberive. Continúa sus estudios de Teología en el Seminario de Issy de los Carmelitas, bajo la protección del futuro Cardenal Jean Verdier.

1929. El 25 de mayo es nombrado subdiácono, en el Seminario de Issy.

1930. El 19 de Abril, Henri Caffarel es ordenado sacerdote por el Cardenal Jean Verdier, Arzobispo de París.

1931. El Padre Caffarel es destinado a la Secretaría General de la JOC, un Movimiento de Jóvenes Orantes,  y en 1934 al Secretariado de Acción Católica para los medios de comunicación.

1936. A partir de este año abandona sus funciones oficiales para dedicarse libremente al apostolado: predicar convivencias y retiros a los jóvenes de los colegios católicos, también atiende la capellanía de la Escuela Normal de Asistentes Sociales.

1937. Organiza en Troussures unos ejercicios espirituales para hogares, lo cual suponía una revolución en el tiempo en que los encuentros mixtos eran poco frecuentes en la iglesia.
Estos jóvenes que conoce en los retiros y los ejercicios llegan un día al matrimonio; entonces, el padre Caffarel se encuentra frente a parejas jóvenes. Empieza una gran aventura.

1939. Nace el Primer Grupo de Parejas. En su origen acude una persona para pedirle consejos espirituales en su vida conyugal, a lo que el padre Caffarel responde que su pareja debería escucharlos también; más tarde recibe al matrimonio. Este encuentro es compartido por otras parejas, y el 25 de febrero se reúne Henri Caffarel, en París, con el primer grupo de cuatro matrimonios en casa de uno de los hogares. “La exigencia de la santidad les concierne. Para responder a ello, tienen un sacramento: el matrimonio”, diría el Sacerdote.

Un segundo grupo nace durante este corto período. Su actividad se ve también interrumpida por la declaración de la guerra: algunos maridos son movilizados. Los grupos están a la espera.

El uno de septiembre, estalla la Segunda Guerra Muncial y Henri Caffarel es llamado al frente. Publica su primera “Carta sobre la oración” después de una homilía ante unos trescientos soldados.
La oración, muy presente en las reuniones desde el principio, va a tomar un lugar más importante. A veces, se le dedican noches enteras para implorar al Señor cuando alguien se ve amenazado o deportado.

1940. El 28 de mayo se recibe la noticia de que Henri Caffarel ha desaparecido, sin embargo, reaparece sano y salvo en julio después de escapar de los alemanes. En ese mismo mes es enviado a la Parroquia de San Agustín.

1942. Marzo. Es nombrado vicario de la Parroquia de San Agustín.

Octubre. El padre Caffarel lanza un pequeño boletín para los hogares cristianos llamado: Carta a unos hogares jóvenes. En la primera carta aparece una alocución sobre el matrimonio, un estudio sobre los distintos aspectos de la familia y un amplio plan de trabajo sobre la comunidad familiar. Desde entonces aparece ya su pensamiento: “Así como el Bautismo une al bautizado a Cristo, el matrimonio une a la comunidad conyugal a Cristo. Entonces, Cristo dice a la pareja: “Ven y sígueme.”

1943. Noviembre. Solicita se le descargue de las responsabilidades de vicario, lo que es aceptado en octubre de 1945 dejándolo con el tiempo suficiente para el acompañamiento a los hogares.
En este año ya hay cien matrimonios en los grupos, sin hablar de los que se formaron en los campos de prisioneros. Al mismo tiempo, se inician ocho matrimonios en Alemania.
El grano se había sembrado en tierra y maduraba a pesar de las dificultades.

Crea la Fraternidad de Nuestra Señora de la Resurrección.

1944. Aparece la revista Foyers (Hogares) que sustituye a la Carta a unos hogares jóvenes.
Esta es la transición hacia otra obra importante del padre Caffarel, una revista dedicada a la espiritualidad conyugal y familiar: L’Anneau d’Or (El anillo de oro), que saldrá a la luz en la primavera de 1945.

1945. En marzo sale a la luz el primer número de la revista El anillo de oro, que contiene reflexiones y enseñanzas sobre espiritualidad, experiencias y testimonios de parejas, y temas de educación y formación. “Les pido con fuerza que tengan en cuenta la Revista en sus oraciones y que sus hijos pidan por su éxito espiritual, en unión con todas las familias de nuestros grupos.” pediría el padre Caffarel. Estas oraciones tendrían sus frutos, ya que dos años después de su lanzamiento, tenía 6.500 suscriptores. La revista y los grupos están muy unidos: los grupos aportan su vida; la revista difunde sus experiencias y los estimula con estudios y cuestionarios. Se establece cierta simbiosis entre los grupos y la revista. El padre Caffarel dirige a ambos.

En la edición de noviembre de L ‘Anneau d’Or aparece un editorial llamado a ser muy conocido: «Un deber desconocido». El Padre, a partir de un texto de San Lucas, inventa el «deber de sentarse», que se va a convertir en una de las obligaciones fundamentales para los hogares del Movimiento. Ponerse juntos, marido y mujer, bajo la mirada del Señor para preguntarse, a la luz del Espíritu: ¿qué hacer para progresar en nuestro amor?, esto se va a convertir en una importante herramienta de la «espiritualidad conyugal». Tan importante, que se ha llegado a decir: «Tendrá un lugar en el código civil». De esta manera, poco a poco, la intuición primitiva se va desarrollando y se va encamando en la vida de los hogares.

1947. El ocho de diciembre fue redactada y promulgada la Carta Fundacional de los que en adelante se llamarían Equipos de Nuestra Señora, para darle “una dirección firme, unas orientaciones concretas y un marco sólido.” De esta manera, el Movimiento tiene un nombre: Equipos de Nuestra Señora, tiene una Carta Fundacional, y, su boletín interno es la Carta mensual.

1948. La Carta Fundacional de los Equipos de Nuestra Señora se publica en el primer número de la carta mensual del mes de enero. El Padre Caffarel y el equipo dirigente la presentan así: “Unida a esta carta encontrarán la Carta de los Equipos de Nuestra Señora. Se trata de un gran acontecimiento en la historia de nuestros grupos de matrimonios. No queremos decir que esta Carta, tal como se presenta, sea perfecta. Estamos convencidos de lo contrario. Pero responde al deseo de numerosos grupos, expresado con frecuencia durante estos últimos años, de una dirección firme, de orientaciones precisas y de un cuadro robusto. Esto es, precisamente, lo que desearía darles en esta Carta.”

1950. Los ENS se desarrollan rápidamente por Francia, Bélgica y Suiza teniendo como apoyo la Carta Fundacional. En 1951 están ya en Túnez y Luxemburgo; en 1952 llegan a Brasil, en 1954 a España y en 1957 a Colombia.

1952. El Padre Henri Caffarel asiste en calidad de expositor a las Jornadas Familiares Internacionales en Oxford – Inglaterra, del 8 al 13 de septiembre. Expuso el papel de Consiliario en los grupos de hogares, en la jornada dedicada al estudio de los factores educativos de la estabilidad familiar. El Padre Caffarel fue el único sacerdote Católico que habló durante este evento internacional.

1954. Del 5 al 7 de junio tuvo lugar la peregrinación a Lourdes y el primer Encuentro Internacional de los Equipos de Nuestra Señora. El Padre Caffarel escogió Lourdes, ya que profesaba un gran amor a la Virgen: “Que Nuestra Señora sea en vuestra casa una madre honrada y querida.” Se reunieron 850 miembros de los Equipos y un centenar de hogares invitados. El punto culminante fue la Consagración del Movimiento a María.

1956. El 27 de octubre se publica “A propósito del amor y de la gracia.” Es el primer libro del Padre Caffarel donde se encuentra, en aquel momento, lo esencial de su pensamiento y de su acción al servicio de los hogares cristianos. Busca ante todo el pensamiento de Dios sobre las grandes realidades humanas.

1957. Julio. El padre Caffarel realiza un viaje por América: visita los Equipos de Brasil, de Colombia y de Canadá.

Publica un artículo: “Cuando unos laicos descubren la oración”, en un número especial de la revista El Anillo de Oro, “Señor enséñanos a orar”: “Para nosotros, orar es dejar que el Espíritu hable en nosotros. Por eso, no podemos tener otro maestro de oración que el mismo Dios: ‘Señor, enséñanos a orar’ (…) Espíritu de Alta Mar, Espíritu de la Palabra y del silencio, Espíritu de oración, Espíritu de Jesucristo, abre los ojos de los que van a leer estas páginas… luego, cierra sus ojos para que, en el silencio profundo de su alma, lejos de todo salvo de ti, oigan lo que ninguna palabra humana puede decir… Señor, enseñanos a orar.”

Este artículo da inicio a los “Cuadernos de Oración” cuyo primer número sale en diciembre de 1957. “Queremos que nuestros Cuadernos sean algo más que una simple revista que se hojea, en busca de información. Nuestra idea es que constituyan una especie de encrucijada de cristianos que se ejercitan en la oración y que quieren formar un gran equipo de oración cuya ley sea: uno para todos, todos para uno, juntos para Dios.”

1959. Del 1 al 8 de mayo, se realiza una nueva peregrinación de los Equipos de Nuestra Señora a Roma. El informe sobre la peregrinación, así como las conferencias pronunciadas, se presentan en un número especial de El Anillo de Oro: “Mil hogares en Roma.” Hubo un discurso del Papa Juan XXIII, dirigido a los miembros de los Equipos de Nuestra Señora y a todos los hogares cristianos del mundo, que aspiran a una vida espiritual profunda.

25 de enero. El Papa Juan XXIII anunció su intención de convocar a un concilio ecuménico, durante la reunión del Colegio Cardenalicio, durante la celebración de la fiesta de la Conversión de san Pablo. El padre Caffarel se verá implicado directamente en la preparación del Concilio.

1960. El 25 de marzo el Cardenal Maurice Feltin aprueba canónicamente los Estatutos de los Equipos de Nuestra Señora, y se confirma al padre Caffarel como Director Internacional del Movimiento.

El 25 de julio, el Episcopado belga fija las condiciones que todo movimiento de espiritualidad para hogares debe cumplir para ser admitido en sus diócesis. Los Obispos consideraron que era parte de su labor pastoral, intervenir en la elección y nombramiento de los consiliarios y responsables laicos a nivel de las regiones y de los sectores belgas. El padre Caffarel estimó que estas condiciones no se pueden aplicar sin cambiar la naturaleza de los Equipos de Nuestra Señora y decide disolver el Movimiento en Bélgica. Esta decisión es anunciada a través de una Carta del Centro Director, fechada 15 de septiembre.

10 de septiembre. El padre Caffarel es nombrado consultor de la Comisión Pontificia del Apostolado de los Laicos para la preparación del Concilio Ecuménico del Vaticano. Prepara dos informes para la comisión: El matrimonio cristiano en la Iglesia en el siglo XX (diciembre 1960), y, La misión apostólica de la pareja y de la familia (mayo 1961).

1962. La agitación provocada por la resolución de los Obispos de Bélgica de julio de 1960, y la decisión del padre Caffarel de disolver los Equipos de Nuestra Señora en Bélgica, felizmente llega a su fin. Se logra un acuerdo entre el Episcopado belga y el Centro Director de los Equipos de Nuestra Señora, que fue anunciado el 25 de marzo. Así el Movimiento reemprende su marcha en Bélgica con un impulso renovado.

El 23 de octubre el padre Caffarel es nombrado canónigo honorario de la Catedral de Notre Dame en París.

1963. El 3 de junio fallece el Papa Juan XXIII y lo sucede Pablo VI.

1965. Del 5 al 7 de junio se realiza una nueva peregrinación de los Equipos de Nuestra Señora a Lourdes. Se fija un objetivo como fruto de esta peregrinación: “Hacer que nuestro Movimiento, que cada hogar, viva una vida más evangélica, haga verdadera la frase de la Carta Fundacional: ‘Hacen del Evangelio la norma de su hogar’. Quisiéramos tener de María esta gran gracia.”
Luego de la peregrinación en Lourdes, tiene lugar una sesión internacional en Roma, finalizando con una audiencia con el Papa Pablo VI, quien da a los Equipos de Nuestra Señora un mensaje: “Seguid con ardor vuestra hermosa tarea. (…) Atraed a otros hogares hacia vuestro noble ideal. Decidles que el Papa conoce vuestro Movimiento, que os anima y que bendice paternalmente a su Fundador…”

1966. Se le encarga una finca en Troussures, una importante casa de espiritualidad a la que decide transformarla en casa de oración, y donde inicia las “Semanas de Oración.” para una enseñanza de la oración y su práctica.

1967. La revista El Anillo de Oro deja de existir. Esta revista que tuvo un gran éxito durante sus veinte y tres años de existencia, termina su tiraje con el número 138. El padre Caffarel comentará más tarde: “La gente me suplica que vuelva a publicar El Anillo de Oro. A mis años, sería una locura, con la cantidad actual de problemas. La problemática ha cambiado mucho en diez años. Y no hay sustitutos.”

1970. Los Equipos de Nuestra Señora hacen una nueva peregrinación a Roma y a Asís. Destacan dos grandes momentos: el discurso del papa Pablo VI, el 4 de mayo en San Pedro; y la conferencia del padre Caffarel, el 5 de mayo en San Pablo de Extramuros. Asisten dos mil parejas de 23 países. El Papa Pablo VI les exhorta y anima: “No os dejéis desorientar por las tentaciones, las dificultades, (…); no tengáis miedo de caminar, cuando sea necesario, a contra corriente de lo que se piensa y se dice en el mundo con mentalidad paganizada. (…) No os desaniméis en la hora del desfallecimiento, nuestro Dios es un Padre todo ternura y bondad, todo solicitud y amor desbordante hacia sus hijos que han de sufrir en el andar.”

Redacta un “Curso de Oración por correspondencia”. En su presentación explica: “La oración es una ciencia que tiene sus leyes y sus técnicas, elaboradas y experimentadas con el paso de los siglos por los grandes Orantes”. Hasta su interrupción en 1988, el curso iniciará a más de dos mil personas en la oración.

1971. El padre Caffarel sufre un quebranto de salud y los médicos le exigen que pare drásticamente de todas sus actividades. Se va de París para descansar durante cuatro meses.

1972. Edita una nueva revista con el título “La Cámara Alta”. Esta revista, en un principio tenía dos metas: ayudar a los grupos de oración y proporcionar información y estudios sobre la renovación carismática. En marzo – abril de 1978, sale el último número de la revista.

Septiembre. Realiza un viaje a Brasil, donde mantiene sesiones con hogares y encuentros que convocan a gran cantidad de personas. De regreso a París, escribe un editorial: “Regreso de Brasil.”

A finales del año, prepara su retirada de la animación de los Equipos de Nuestra Señora.

1973. Deja su servicio al frente de los Equipos de Nuestra Señora tras asegurarse su sucesión, y se consagra enteramente, con pluma y con la palabra, a promover la oración interior incansablemente hasta los últimos meses de su vida.
El 25 de marzo da una Conferencia a los responsables de Sector reunidos en París: “…tengo setenta años de edad, y hace ya treinta y cinco años que me ocupo de los Equipos. Nunca había pensado que he dedicado la mitad de mi vida a los Equipos. Tengo que deciros que ya es hora de que pase el testigo a otro…”, continúa: “En realidad, no es absolutamente cierto decir que me voy porque tengo setenta años de edad y treinta y cinco en los Equipos. Me voy porque creo que los Equipos, después de treinta y cinco años, entran o deben entrar en una nueva fase, hay que tener, al menos, quince años por delante. Yo no dispongo de quince años.”

1976. El 23 de septiembre, el padre Caffarel habla en la Basílica de Nuestra Señora de los Ángeles, en Asís, a miles de hogares venidos de treinta países al encuentro que se realizó en esta ciudad y en Roma. “Francisco, ¿quién eres?, ¿qué nos tienes que decir?. ¿Cuál es el mensaje de Francisco de Asís a los hogares cristianos del siglo XX que acaba.? Nada más que el radicalismo evangélico del amor total; ‘el cristiano debe ser otro Cristo, si no, no es nada’.”

1979. Diciembre. El padre Caffarel abandona definitivamente su casa en París, y parte a Troussures, donde se van a concentrar las actividades de sus últimos años.

1987. El 3 de mayo el padre Caffarel imparte una importante conferencia a un grupo de responsables regionales del Movimiento, en Chantilly, Francia. Esta será su última intervención ante los Equipos. Recuerda la intuición de los orígenes y el desarrollo de los Equipos; los aportes en cuanto a la espiritualidad conyugal; la necesidad de profundizar en lo que atañe a la vida sexual, el cambio de los tiempos y las obligaciones nuevas.

1988. Se publica el libro: “Los Equipos de Nuestra Señora. Desarrollo y misión de las parejas cristianas.” Este libro recopila los grandes textos del padre Caffarel, y la conclusión se inspira en la Conferencia que dio en Chantilly. Esta obra es la base indispensable para comprender a profundidad el pensamiento del fundador de los Equipos de Nuestra Señora sobre la espiritualidad conyugal y sobre el Movimiento. Es el último libro que publica.

1989. Termina la publicación de los Cuadernos sobre la oración. La realización de esta obra, que es bimestral, pesa cada vez más para un padre Caffarel ya anciano. En julio de 1986, hace un pedido: “Ésta es una llamada acuciante. Llamada a vuestra oración, a vuestra colaboración. (…) busco a alguien que se apasione por vuestra revista y a quien entregaría la antorcha con gusto, después de veintiocho años de trabajo en este maravilloso cargo.” Tres años más tarde, se tiene que resignar a esta supresión. La revista desaparece, la oración permanece.

1990. Envía una carta a los antiguos suscriptores de los Cuadernos sobre la Oración: “La amistad nos incita hoy a hablaros de nuestros proyectos y de nuestras actividades (…) Estamos muy impacientes por responder a esta profunda aspiración a la oración que muchos hombres y mujeres ponen de manifiesto. Intentamos hacerlo a través de libros, varios están en fase de preparación…” El padre Caffarel dedica lo mejor de sus fuerzas a las Semanas de Oración. Estas Semanas seguirán hasta finales de 1995.

1996. A inicios del año, graves problemas de salud obliga a la hospitalización de Henri Caffarel, que finalmente muere el 18 de Septiembre. La misa de funeral tuvo lugar en la intimidad y fue celebrada por Monseñor Thomazeau, Obispo de Beauvais, con la comunidad de la Casa de oración de Troussures. Fue sepultado en el cementerio de Troussures.
Sobre su tumba, había indicado que se escribieran tres fechas: la de su bautismo, la de su ordenación sacerdotal y la de su muerte. Fechas que marcaron su vida de hijo de Dios.