Los discípulos estaban enzarzados en una discusión sobre la sentencia de Lao-Tse
“Los que saben no hablan;los que hablan no saben”
Cuando el Maestro entró donde ellos estaban, le preguntaron cuál era el significado exacto de aquellas palabras.
El maestro les dijo:
– “¿Quién de ustedes conoce la fragancia de una rosa?”
Todos la conocían.
Entonces les dijo:
– “Exprésenlo con palabras”.
Y todos guardaron silencio.
C/ Federico Ma. Sanfelíu,s.j.