VIERNES SANTO

Mel Gibson puso en imágenes sangrientas la Pasión de Jesús. Y en la oscuridad del cine y en nuestra butaca unos lloraron, otros sufrieron, otros fueron a confesar sus pecados y todos salimos mudos y estremecidos… ¿Una película, un recuerdo de un día, una conversación y hasta la próxima? Los evangelios, Palabra de Dios, pusieron