MUCHOS PREMIOS Y CASTIGOS SON SIMPLEMENTE CONSECUENCIAS
Un líder político estadounidense del siglo XIX afirmó: “En la vida no hay premios ni castigos, sino consecuencias”.
Muchos premios o triunfos no son más que consecuencias de un trabajo constante bien realizado. Y muchos males o castigos no son más que el resultado lógico de conductas negativas o no coherentes.
Resulta ser muy realista y sabio hablar de consecuencias que de premios o castigos. Los premios o castigos parece que provienen de lo alto y no son fruto de nuestro comportamiento. Las consecuencias, en cambio, son fruto de nuestro actuar y el resultado lógico de nuestra conducta.
Esta lógica tan elemental a veces falla, y de ahí se derivan múltiples decepciones.
P. Juan Bestard Comas.