España es una de las democracias estables altamente desarrolladas consideradas país de referencia por los grandes equipos de investigación sobre estabilidad y calidad de la democracia. Freedom House, que ofrece las mediciones de respeto de los derechos políticos y las libertades civiles de uso más frecuente, ubica al español en el puesto 20 de los 86 Estados libres, con una puntuación superior a la de países como Francia, el Reino Unido o Estados Unidos.
La unidad de inteligencia de The Economist, que mide más atributos, incluyendo factores de cultura política, y tiene en cuenta datos de opinión pública además de opiniones de expertos, otorga a España un 8,08 sobre 10. Esta puntuación la mantiene en la primera división de las democracias plenas, mientras que países de su entorno como Portugal, Francia, Bélgica o Italia permanecen en la segunda división de las democracias con defectos.
CRISTINA ARES
Elecciones en abril
La Voz de Galicia