DE NADA SIRVE CONSTRUIR MEDIO PUENTE
Sólo con oír el proverbio chino se me iluminó el alma y se me aclararon rincones de la conciencia. No sin dolor. Vi de repente la imagen del medio puente. Desde una orilla hasta el centro del río. Apéndice colgante, proyección inútil, gesto de piedra incompleta sobre el correr de las aguas. Monumento al ridículo